pequeña gente haciendo pequeñas cosas, consigue grandes metas.proverbio africano.
El silencio de la hipótesis o el
secuestro de la ciencia en el SXXI.
Los placebos que utilizamos también
son palabras.
¿Cómo podemos mirar para otro lado?
¿Cómo hacen para que no sigamos leyendo?
A diferentes niveles diferentes
remedios, cada fase de desarrollo humano parece que se escribe en
letra pequeña, el presente de la no simultaneidad, el pasado pasado
está. NOSOTROS ya superamos esa fase, nos espera el futuro, ese
incierto vacío destino.
Abracadabra, la creación es una
combinación elegida de letras, a la que dotamos de significado, con
las que interaccionamos, con las que jugamos.
¿Cómo nos clasifican según el
paradigma? Cada cortijo tiene sus leyes, a eso se llama ser
circunstancial, nunca aprendemos el todo absoluto, no nos dejan
terminar de leer, nos entretienen, incluso nos dejan que nos sintamos
bajo su paraguas de información. Tú y yo lo sabemos. Aquí y ahora.
Todo empieza por la desintegración del
ser, para su posterior reencarnación, tras el milagro,
El pan, los peces, el vino, la mesa
servida.
La traición, el castigo, la guerra.
Aquí suena el teléfono, aumentan las
ofertas, se colapsa la caja registradora,
crecen los huertos solares, los huevos
integrales, huevos ecológicos,
vuelven los coyotes a pasar la aduana,
vientos de cambio, soplan desde la frontera.
Allí mustfa recoge patatas,
se las regala a joaquin,
que se las da a jose, y a encarna,
que las reparten a a y a q,
la cadena de favores, el trueque, la
magia de la divisa inmaterial, la gracia de la vida,
compartir una caja de patatas.
En el sahel no tienen patatas, ni
siquiera la última bolsa, esa que se vacía en el contenedor,
y que en nuestro paradigma significa
amor y ternura, compasión por la naturaleza, reciclaje, reducción
de residuos, volver a usarlos como los arboles, materiales perennes o
caducos.
Así nos lavamos las manos, reducimos,
reutilizamos y reciclamos, mientras tiramos cajas de patatas a la
basura. NOSOTROS.
La ciencia dispone, propone, mejora,
aumenta, el poder secuestra, manipula y distorsiona, así se mira el
rey su ombligo en el siglo XXI.
